2007/05/30

Barcelona - Civitavecchia

Lunes 23 de Abril de 2007
El 23 de Abril es el día de San Jordi y en Barcelona se celebra regalándole una rosa a tu novia o a alguna amiga. Las chicas regalan libros a los chicos. Ese día las calles están llenas de flores y en especial las Ramblas. Por esta razón he decidido esperar hasta hoy para iniciar mi viaje en moto de vuelta a Bilbao (vía Roma).
Los últimos días los he pasado planeando las rutas con viamichelin, ésta es una pagina web que recomiendo porque te permite poner entre sus opciones elegir el camino que haría una bici a 30km/h (así pensaba
ir yo de rápido). Mi intención era usar el móvil como Gps pero no he podido cargar el programa a tiempo. Esta última semana oía constantemente una voz en mi cabeza que me decía: "vas a tener un accidente, lo sabes, y va a ser por tu culpa, déjalo mientras aún puedes andar..." Supongo que este tipo de ideas recurrentes de que te va a tocar a ti es normal. Ya me pasó cuando me iba a tirar en paracaídas... el mio no se abriría.
Por la mañana he dado una vuelta por las Ramblas, luego me he comido un Kebab y a las tres y media me he ido para el puerto. La foto es en la cola listo para embarcar. El barco zarpaba a las cinco. Una hora mas tarde escribía en el diario de viaje:

"Son las seis, el barco acaba de salir. Estoy escribiendo en mi nuevo teléfono móvil. La moto esta aparcada en las bodegas. Yo estoy sentado en una poltrona, la cual no me corresponde porque el barco esta lleno y se supone que no tengo un sitio fijo. Creo que acabo de tener la pega del viaje, espero que solo sea ésta. Me ha tocado estar con un grupo de estudiantes napolitanos que venían de un fin de semana en Salou. El ruido que hacen es doble, uno por ser estudiantes y otro por ser italianos. La única ventaja es que quizá nadie reclame mi asiento porque esta gente va a estar de fiesta toda la noche. Por si acaso me he sentado entre unos árabes, no creo que les apetezca mi sitio. Da la impresión de que nadie mira los números del asiento, me será fácil hacerme el dormido. Eso si, en cuanto saque el jamón serrano...los árabes..."

Así empezaba el viaje.